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viernes, 10 de abril de 2020

EL MILAGRO DE VALLITA



     Clarissa era una niña muy alegre e inquieta, la mejor estudiante de su clase. Por las tardes al llegar de la escuela, solía hacer sus tareas temprano para poder salir a jugar con sus amiguitos. Se divertía mucho con ellos, pero su mayor alegría era ir de visita a la casa de su abuelita que vivía en la ciudad de El Tigre. Sus padres la llevaban muy seguido hasta allá, pero los últimos meses ya no lo hacían como antes porque le decían que su abuelita estaba un poco enferma y necesitaba descansar, que al finalizar las clases, si salía bien en sus exámenes, si la dejarían quedarse a pasar un tiempo con ella. La niña, por la emoción de ir a ver a su abuela, se estaba esforzando cada día más en sus estudios y realmente había logrado obtener excelentes calificaciones.

     Al finalizar las clases, la niña les recordó a sus padres la promesa hecha. Ellos al ver que ya no podían evitar llevarla a El Tigre decidieron viajar y ya al estar en la casa de su abuelita,le explicarían lo delicada que se encontraba de salud. La señora había caído en cama meses atrás con una enfermedad incurable, y los médicos no le garantizaban mucho tiempo de vida; decían que sólo un milagro podía salvar a la dulce anciana, y los padres de Clarissa no sabían cómo decirle a la pequeña la verdad de lo que estaba pasando. Esa misma tarde, partieron rumbo a El Tigre. La niña brincaba de emoción en el asiento trasero del auto al ver el anuncio de bienvenida que se encontraba en la entrada de la ciudad. Iba a ver a su abuelita, eso para ella era una inmensa felicidad.

    Clarissa y su abuelita, eran muy devotas de la Virgen del Valle. La señora tenía un hermoso altar en su casa con la imagen de la Virgen y muchas flores. Ella le contaba a su nieta muchas historias de los milagros de Vallita, y de las hermosas celebraciones que hacían en su honor en todos los pueblos del Oriente del país, sobre todo en la Isla de Margarita.

     Por las tardes, ambas se iban a caminar por el Paseo la Virgen, un lugarcito muy lindo de la ciudad donde se encuentra una imagen de la Virgen del Valle, patrona de El Tigre. Allí pasaban largas horas conversando, nieta y abuela disfrutaban muchísimo de esos paseos, y la pequeña escuchaba con emoción los relatos de su abuela.

     Cuando ya sentían hambre, se iban a un hermoso centro comercial que queda cerca que se llama San Remo Mall. Allí iban al cine, a comer, y a ver las tiendas. Para Clarissa, ir a visitar a su abuelita era lo más divertido.

     Le gustaban los paseos al aire libre por todos los caminitos de la inmensa Plaza Bolívar, mientras disfrutaba de un helado y de las divertidas historias de Doña Manuela. Ella le decía que aquella plaza era la más grande de toda Venezuela, y realmente lo era, poseía hermosas jardineras, y muchos árboles. En ella se hacían eventos importantes y desfiles escolares. En el centro se apreciaba la altiva imagen de nuestro Libertador, Simón Bolívar, sobre su caballo.

     La ciudad de El Tigre poseía muchísimas historias bonitas acerca de su fundación, de cómo poco a poco se fue formando una gran ciudad desde la llegada de los primeros habitantes, casi todos de la Isla de Margarita, que fueron entrando en ella a partir de la apertura petrolera por la perforación del primer pozo al que llamaron Oficina Nº 1 (OG-1). La fundación oficial de la ciudad de El Tigre se consideró a partir de la explotación de ese primer pozo petrolero, y así se fue formando esa cálida tierra llanera, donde el petróleo y la agropecuaria eran sus principales medios de economía.

     La abuelita de Clarissa nació en medio de la algarabía del llanero que a tempranas horas del día se levantaba a arrear el ganado y trabajar el campo. Donde el olor a vegetación llanera llenaba el alma de vida, porque el aire puro de esas tierras permitía disfrutar de esa sensación tan placentera.

    Doña Manuela le relataba a la pequeña niña tantas historias, y con su manera tan especial de contarlas, resultaban más divertidas y emocionantes. Por ejemplo le decía que en el medio de la sabana existían unas mesitas de tierra y que si uno se montaba en ellas podía ver el corazón de El Tigre. Ella se refería a las montañas que se formaron en los llanos de la Mesa de Guanipa, cuyo nombre, “mesa”, se debía a las formaciones montañosas semejantes a los tepuyes que se encontraban en toda esta región llanera, y que parecían unas mesas.

     A Clarissa le gustaba el llano tanto como las historias de su abuelita, y siempre le pedía que la llevara los fines de semana al río Tigre, uno de los más extensos de aquella zona de Oriente. Pasaba por varias poblaciones, y cuenta Doña Manuela, que en tiempos de su abuelita, las mujeres del pueblo solían lavar la ropa en las orillas del río, mientras entonaban algunas melodías.

    Para que Clarissa disfrutara aún más de las visitas a la ciudad de El Tigre, su abuela organizaba una excursión al Campamento Llano Alto, uno de los lugares turísticos de la ciudad donde la pequeña pasaba largas horas metida en la piscina, disfrutando las atracciones, y sobre todo, dando paseos a caballo por el campo. Ésa era una de las cosas que más disfrutaba, a ella le fascinaban los caballos.

                          

     El campamento ofrecía paseos guiados con un grupo de jóvenes, y Clarissa se sentía más a gusto porque no iba sola. Siempre había muchos jóvenes en el lugar, y conocían bastante aquellas tierras. Ellos también le relataban historias que les contaban sus papás. Cuánto extrañaba Clarissa esos paseos, pero ahora llegando a casa de la abuelita se había dado cuenta que las cosas no andaban bien. Los padres se sentaron a hablar con ella al momento de entrar a casa, y le comunicaron que Doña Manuela estaba muy delicada y que los médicos decían que sólo un milagro la salvaría.

     Clarissa lloró muchísimo, y en medio de sus lágrimas le dijo a sus padres que eso jamás pasaría, que la abuela confiaba en la virgencita y que ella sabía que había hecho muchos milagros. Que deseaba que la llevaran en ese momento a la Iglesia donde todos los domingos su abuela la llevaba, la Iglesia de la Virgen del Valle. Que ella hablaría con la Virgen y pediría que le hiciera ese milagro para su abuelita.

     Aquella misma tarde, después de saludar a la anciana entre besos y abrazos, mirándola allí en su cama, sin fuerzas, con su rostro demacrado, los padres de Clarissa le cumplieron su deseo y la llevaron a la vieja iglesia que se encontraba en el casco viejo del pueblo. La pequeña fue hasta el rinconcito donde se encontraba la Virgen, y de rodillas ante ella le pidió con todas las fuerzas que su alma y su corazón le permitieron, que sanara a su abuelita, que ella era el ser que más amaba y que no se la llevaran de su lado.

    Clarissa pasó horas rezando dentro de la iglesia, y el padre se acercó a ella por la atención que le llamó al ver sus lágrimas y su silencio frente al altar de la Virgen. Al preguntarle qué le pasaba, y la pequeña, relatarle, él le dijo: "Ve con Dios, pequeña, y jamás pierdas la fe. Yo estoy completamente seguro de que Vallita te escuchó, y verás su milagro reflejado muy pronto. Al llegar a casa, los padres de la niña quedaron sorprendidos al ver a Doña Manuela regando las matas de su jardín. Quisieron llevarla de regreso a la cama, y ella les dijo que no, que la dejaran tranquila, que se sentía muy bien, y que además, ya le había preparado un delicioso postre a su nieta, y que ambas tenían muchas cosas que disfrutar juntas".

    Todos quedaron sin habla, asombrados de lo que veían. Incluso los doctores, que al acudir por el llamado de los padres de Clarissa, fueron a revisar a la anciana y encontraron que realmente su salud había mejorado, no entendían lo que estaba pasando. La pequeña sólo les dijo sonriendo: “No hay nada que entender doctor, es un milagro de Vallita”. Esa tarde, Clarissa, su abuela y sus padres se fueron a pasar un delicioso momento en CondeAventuras, un lugar típico de la ciudad y rieron y se divirtieron como nunca.

Autor: Ana C. Rivero Foucault 

CONTENIDO PARA ANALIZAR Y RESPONDER:

1) ¿Qué te gustó más de la historia?
2) Menciona los personajes de este cuento
3) Describe a Clarissa
4) ¿Cómo se llamaba la abuelita de Clarissa?
5) ¿Sabes dónde está ubicado El Tigre? ¿A qué país pertenece?
6) ¿De dónde es patrona la Virgen del Valle?
7) Hay una obra del escritor Miguel Otero Silva que se llama Oficina 1, y relata la historia de El Tigre ¿La has escuchado nombrar? ¿Qué opinas de ella?
8) ¿A qué se refieren en el relato al mencionar Oficina 1?
9) ¿Por qué se curó la abuelita de Clarissa?
10) ¿Qué lugar visitó Clarissa al final de la historia?

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